Mientras el comunismo ha sido estigmatizado durante mucho tiempo y sobre todo después de la caída de la URSS, por medios de comunicación y por intelectuales llamados progresistas, que tratan de confundir a la clase trabajadora, sobre soluciones dentro del mismo sistema cuando la verdad es que  el sistema capitalista a través de organizaciones no democráticas como OMC, FMI, BC. Nos devora sin compasión alguna y nos lleva a la misma ruina. Toda transformación de la sociedad pasa por destruir el mismo sistema capitalista, que ha gozado de mucho prestigio durante un largo periodo de tiempo y más aún no dando nuevas alternativas, demonizando de forma permanente el marxismo, entre la dicotomía democracia o dictadura.

En el fondo todo nos lleva a repensar nuestro papel en este mundo globalizado-imperialista el papel que ocupa la clase trabajadora, su explotación y su dirección con una izquierda desaparecida y fragmentadas en crepúsculos partidos y viviendo del sistema.

Pero no dejando atrás el mismísimo responsable el Estado como forma ideológica del neo-liberalismo para mermar su función prioritaria de proteger a los ciudadanos, están apiñados con los mercados y reprimiendo protestas legitimas ante tantos recortes de lo común.

La poca reacción de la clase trabajadora que durante mucho tiempo se acomodó al sistema como el mejor sueño posible, el consumismo propiciado por los grandes medias y por el mismísimo Estado, nos ha conducido a un nuevo despertar de esta nueva realidad miserable, el llamado estado de bienestar que su función era apaciguar el papel revolucionario del proletariado y domarlo, para dominarlo a su antojo, ante todo esta panorama que parecía real estaba sometido a lo relativo, nada es permanente.

Se debía plantearse un nuevo paradigma de todos estos grupos de indignados que ocupa parte de Europa, como forma de una gran plataforma social conectadas entre si, para hacer un frente común amplio, concienciando a la mayoría de la gente resignada e individualista con lo que pretende los gobiernos neo-liberales y el poder económico mundial.

Se repite hasta la saciedad que los mercados desregulados, provocaron este tsunami económico, pero la culpa de todo este fenómeno fue consentidos por los mismos Estados-nación que permitieron este desajuste.

La Unión Europea y la adopción de la moneda única el Euro, puede contribuir a los países del norte de Europa, pero no en la periferia donde las economía débiles no puede competir en iguales condiciones, rompiendo la ley de estabilidad que presuntamente se suponía. Tal asimetría lo sabía todo los organismos oficiales, incluso la verdadera hitleriana, la monstruosa Merkel, que imponen esta forma tan criminal de ir menguando la vida de los ciudadanos, algunos que lo han perdido todo, su resignación pasa por el suicidio como la mejor forma de romper con los lazos que esta sociedad capitalista que nos imponen.

La cara aparente amable pero explotadora del capitalismo que se dio después de la 2ª guerra mundial fue una concesión por la presión de unas clases trabajadoras revolucionarias, donde un bloque de revolucionarios toma el poder desde1917, con sus contradicciones, pero que seguía influyendo como referente ideologico-politico-economico, ahora esa cara del capitalismo ha sido transformada por un neo-capitalismo criminal que soborna  a los pueblos para que se adapten a sus prioridades, “el beneficio” y la expropiación de los bienes comunes.

Cuando me refiero a una clase de intelectuales, que prefiero no nombrar, tratan de confundir a las clases trabajadoras que dentro de este sistema depredador pasa reguladores económicos y trasformadores de políticas más igualitarias. sueñan con la verdadera “utopía”.

Después de ver como el Estado Capitalista corrompido desde sus mismas estructuras. La única opción pasa por su destrucción y abrir un camino nuevo hacia la emancipación del ser humano y a la verdadera toma de decisión horizontal y me hace recordar una frase de hace mucho tiempo: Un fantasma vuelve a recorrer Europa, el fantasma del comunismo.

Notas: desde un parlamento capitalista no se puede reformar nada solo legitimar el poder del sistema la lucha está en la calle, ¡Participa!