INCOMPATIBILIDADES
REALES.-
Si el sistema socialista permite una
convivencia efectiva con el capitalismo como paso previo hacia el
socialismo-comunismo, desde mi humilde rincón de reflexión considero
contraproducente esa relación, dejando atrás la historia y las mismas
relaciones que los sistemas socialistas han desarrollados a lo largo de sus
procesos, comprobaremos que ya no hay lugar para seguir manteniendo ese tipo de
relaciones, aunque en el pasado existían como paso previo hacia su
construcción, comprobaremos como han terminado todos los países del Este y su
llamado socialismo-real demolidos por sus contradicciones internas y si no
echemos un vistazo a la supuesta 1ª potencia mundial, China, donde conviven
armoniosamente los dos sistemas bajo el imperio del Estado y el partido comunista
Chino (PCCh).
Ahora se abre un nuevo tiempo,
precisamente el capitalismo está en punto muerto y camina hacia su destrucción,
el aumento de sus contradicciones lo hacen insostenible, propenso a devorar
todo: medio ambiente, trabajo, salud y relaciones sociales. Tenemos la
experiencia en los países anti-imperialistas:
latino-américa y en la construcción del socialismo del siglo XXI.
Observamos que se hace imposible una relación normal con el capitalismo, es más
impide cualquier reforma revolucionaria, el caso más concreto es el de
Venezuela donde los nuevos intentos de golpes de Estado perpetrados por los
poderes económicos con la colaboración de grupos de ultra-derechas a fines al
imperio norteamericano han supuesto perdidas de vidas humanas, económicas y un
retroceso-revolucionario.
Está claro que existe un debate interior,
pues aunque la historia nos la presentan
como unas series de acontecimientos o fenómenos lineales casuales y no a
pequeñas fluctuaciones, donde actúa muchos factores intrínsecos, dependiendo el
tiempo y el desarrollo intelectual determinado, comprobaremos que en toda
relación de poder se tejen contradicciones difícil de superar, el divorcio
entre el Estado y el pueblo es un hecho consumado desde los nacimientos de los
estados/nación.
Volviendo al referente
que conviene recordar todo intento revolucionario en los países
latino-americanos, incluso por medio de elecciones-democráticas como el caso de
Chile en la década de los 70 del siglo XX, terminaron en golpe de Estado, con
violencia y asesinatos masivos y la perpetuación en el poder de una dictadura
diseñada por el Esblishment de Washington como también los procesos
revolucionarios en Nicaragua y otros países del entorno. Ahora está pasando en
Venezuela, las elites económicas y políticas que durante siglos han estado
robando al pueblo no se resignan a perder el poder y emprenden toda clase de fechorías
intentando torpedear las reformas sociales que se han hecho durante el gobierno
de Hugo Chávez. Por tanto habrá que plantearse una nueva forma de entender que
relaciones deben existir entre estos dos sistemas tan antagónicos, mientras que
el socialismo construye espacios de libertad y convivencia, el capitalismo
destruye todo lo generado.
Nunca ha impedido Marx,
ir más allá del conocimiento y aportar nuevos horizontes científicos que el
estudio de la dialéctica proporciona y en la base a que el contribuyó con su
estudio sobre el capitalismo, sociología, filosofía e historia.
Heráclito filosofo
griego nació en el año 535 a.C. afirmaba “que
el fundamento de todo está en el cambio incesante. El ente deviene y todo se
transforma en un proceso continuo nacimiento y destrucción al que nada escapa”.
El capitalismo tiene su lógica, su naturaleza, el capital
funciona como un dios que impone su ley al hombre, los capitalistas son, en
palabras de los clásicos, “personificaciones del capital”, frase terrible que
anuncia la deshumanización de la sociedad en el altar de la mercancía, del
mercado. El capital tiene necesidad de crecer, de circular, de reproducirse,
ésta es su naturaleza. Al decir capital estamos hablando de un monstruo que
pasará por encima de cualquier consideración para cumplir su destino:
reproducirse.
Conclusión: para la
construcción de un verdadero socialismo debe quedar claro que toda relación con
el capitalismo es destructivo, dividiendo a la sociedad, aunque momentáneamente
perviva durante la transición al socialismo lo más efectivo su pronta
destrucción si no el capitalismo destruirá de pleno el socialismo y todos lo
logros alcanzados.
1 comentario:
Juan, me llamo Rafael González estamos haciendo un reportaje sobre la balsa de Fosfoyeso en Huelva para una productora audiovisual. Me gustaría contar contigo. Puedes escribirme un contacto tuyo a este correo r.gonzalez@360globalmedia.es y así te puedo explicar más detenidamente todo.
Muchas gracias.
Publicar un comentario